Esta semana (4 de Marzo) se han cumplido 3 años desde que pisamos por primera vez estas tierras. Echo la vista hacia atrás y no puedo evitar emocionarme si pienso en ese día. Cuando vimos la barrera de coral desde la ventanilla del avión antes de aterrizar, nos cogimos de la mano y acojonados perdidos, nos miramos y dijimos: ahora si que empieza la aventura.
Atrás habíamos dejado a nuestr@s amiga@s, familia, trabajo...sin saber lo que nos esperaba, con miedo e ilusión, con el corazón en un puño pero seguros de que esta experiencia no la íbamos a olvidar nunca y que para bien, nos haría crecer. Ahora, con el paso del tiempo puedo decir que no ha sido fácil, que hemos tenido que superar un montón de baches, momentos buenos y no tan buenos, conocer a gente del bien y gente no tan del bien, muchos ratos de soledad, de morriña y añoranza sin un abracico de los nuestr@s... A pesar de todo esto, el balance es más que positivo. A nuestras espaldas un montón de vivencias con las que hemos crecido mucho como personas y como FAMILIA. Por suerte siempre nos hemos tenido el uno al otro, apuntalándonos cuando uno de los dos se venía un poco abajo, aprendiendo a cuidarnos y a querernos mucho más que antes , de la mano, agradecidos por habernos encontrado en el camino y de estar viviendo esta aventura juntos
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A nivel personal, por mi parte, la lista de cosas que he aprendido y he descubierto sobre mi son innumerables. Un idioma nuevo, confiar y creer más en mi, a relativizar la distancia, a ser más independiente, más flexible, vivir el momento y no regocijarme en la morriña del pasado ni en la incertidumbre del futuro, darme cuenta de lo que echo de menos los mejillones en escabeche y el jamón serrano, a desdramatizar, mi fortaleza, mis debilidades, el amor tan absoluto que le tengo a mis amig@s y a mi familia (eso ya lo sabía) pero ahora más, que las cosas y los sentimientos no son estáticos, ni para siempre, que el mundo es muy grande y está lleno de posibilidades y sobre todo, como bien dice mi gran amiga Olga recitando un poema de la poetisa "Ajo", he aprendido que : NO HAY TANTO PELIGRO PARA TANTO MIEDO.
Hoy, tres años después de llegar a Australia, nos encontramos en la misma situación: acojonados, ilusionados y seguros de que la nueva aventura en la que nos hemos metido, nos va a cambiar la vida y nos hará intentar ser la mejor versión de nosotras mism@s. Vamos a tener un@ mini wallabi! Un@ australianit@ Queenslander, al que le gustará el vegemite para desayunar y saludará diciendo G'day mate!!!!!! jajajajajjajajajja... Aún no nos lo creemos! Esta aventura si que va a ser para toda la vida, no como lo de venir a Australia que se pasa con coger un avión de vuelta a España ;)
Somos muy muy felices y aunque en el blog, no os contaré mucho del embarazo, si que lo haré de como a nivel sanitario y social es tener un@ hij@ en Australia :)
Tenemos la suerte de tener una gran familia español-latina-australiana que nos cuida, nos arropa y nos mima a rabiar. Gracias a ell@s, todo es más llevadero y nunca tendremos palabras suficientes para agradecerles el amor con el que nos cuidan y lo querid@s que nos hacen sentir. MUCHAS GRACIAS! Os queremos mucho
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Algun@s os preguntaréis, que qué leches hacemos que no estamos volviendo cuando nuestro objetivo inicial era volver a los 3 años Pues que sepáis, que no es por falta de ganas, pero vosotr@s mejor que nadie, sabéis como está la situación en nuestro país de chorizos y pandereta, así que hasta que no pase el caloret o el fred del verano, ya no me queda claro, no va a ser posible :(
Esta semana no se si es porque hace tres años que estamos aquí, hace año y cinco meses que no os abrazo, hay luna llena, tengo las hormonas locas, estoy preñada, o un poco de todo... os he echado mucho de menos. Ainsssssssss....
Bueno hermosuras mías, cuidarse mucho. Os mando mucho amor, ahora que estoy más llena que nunca, en forma de ondas interoceánicas.
Siempre bajo el mismo cielo
Os queremos!
Javi&Yoli
